Son muchas las cuestiones relacionadas con las herencias y testamentos con las que tratamos de manera habitual los abogados de herencias de Durango. Hay personas que descubren, a veces demasiado tarde, que el hecho de que su nombre aparezca en un testamento puede convertirse en un problema. El difunto ha querido que te quedaras con una parte de sus posesiones, pero con ellas te llega también una parte de sus deudas y obligaciones.

Muchas veces, el valor económico de la herencia que deja el difunto puede ser cuantitativamente inferior al de las deudas que deja en el momento de su muerte. Deudas que, en la misma proporción en la que se reparten sus bienes, se reparten también entre los herederos. De modo que, puede ocurrir, y de hecho ocurre con mucha frecuencia, que la herencia, en lugar de significar un aporte económico, conlleva la obligación de pagos en una cuantía importante.

En casos así, como abogados de herencias de Durango tenemos que informar a nuestros clientes que, además de asumir las deudas del fallecido, una herencia supone también una serie de gastos en impuestos y gastos administrativos que hay que analizar con detalle antes de decidir. El impuesto de sucesiones, por ejemplo, varía al alza cuanto más alejado sea el grado de parentesco que unía al fallecido. Si en la herencia figuran vienen inmuebles, además de los gastos de registro es importante analizar los impuestos de plusvalía que también pueden ser elevados.

A la vista de todos los gastos, muchos clientes optan por la posibilidad de rechazar la herencia, para ello, con el asesoramiento de Aitzol Legarreta Astorkia preparan un escrito de renuncia que deberán firmar ante un notario.